La Biblia no es solo un texto religioso, sino la Palabra viva, inspirada por Dios, que habla verdad y sabiduría a todas las generaciones. 2 Timoteo 3:16 captura su origen divino y propósito vital, declarando: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia.” Este versículo es un poderoso recordatorio de la fiabilidad, la integridad y el papel de la Biblia al guiarnos hacia Jesucristo como Señor, Dios y Salvador. Exploremos cinco verdades clave sobre este pasaje, cada una respaldada por la Escritura, para entender por qué la Biblia es fundamental para la fe cristiana.